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El convento de San Francisco Ad Coenaculum vuelve a abrir sus puertas a los peregrinos

Giacomo Pizzi1 febrero 2013

Desde hoy, 1 de febrero de 2013, los peregrinos podrán volver a celebrar misa en la iglesia del convento de San Francisco Ad Coenaculum, en el Monte Sion, a pocos metros del Cenáculo, en el que se recuerda la Última Cena y el Pentecostés.

Y los frailes franciscanos podrán volver a vivir en su convento, ahora totalmente renovado. Inicialmente, los trabajos de restauración comenzados en marzo de 2012 estaban previstos solo para una parte del edificio. Pero transcurridos los primeros meses de las obras de demolición y de retirada del amianto, se puso de manifiesto que dicha restauración era mucho más complicada de lo previsto. La dedicación y la atención constante del Padre Presidente del convento y de la Tesorería de la Custodia de Tierra Santa han permitido a la Oficina Técnica de la Custodia, responsable general de la realización de los trabajos, hacer lo necesario para mejorar todos los aspectos estructurales, tanto los funcionales como los estéticos.

Se han aplicado tecnologías de vanguardia en todo el conjunto, en concreto para reducir la humedad ascendente del terreno, y se han incorporado instalaciones y soluciones técnicas que permitirán un considerable ahorro energético. Además, la intervención ha facilitado la recuperación de muchos espacios que antes no se utilizaban.

Durante los próximos meses continuarán las obras de restauración del jardín y la renovación de la capilla inferior del convento, que se ornamentará con vidrieras diseñadas por el artista italiano Michele Canzoneri.

La restauración del convento y la reapertura de la iglesia que va a permitir realizar celebraciones junto al Cenáculo, lugar de vital importancia para los muchos peregrinos que llegan a Jerusalén siguiendo las huellas de las vivencias terrenales de Cristo, forman parte de un proyecto más amplio denominado “Jerusalén, Piedras de la Memoria “.  A través de este proyecto, la Custodia de Tierra Santa con el apoyo de ATS pro Terra Sancta, está restaurando y manteniendo santuarios y conventos, además de muchas viviendas para los cristianos de la Ciudad Santa.