Belén, el problema del agua y la historia de Ilyas

Giacomo Pizzi28 noviembre 2014

En una tierra donde la sequía es una constante durante varios meses al año, la mayoría de los hogares -y en particular en las comunidades más pobres y vulnerables- no tiene suficiente agua potable. Es un problema que afecta de manera significativa la vida cotidiana de cientos de miles de personas de toda Cisjordania.

En la mayor parte de la región, de hecho, las autoridades ocupantes controlan la distribución de agua, y en los pueblos y ciudades bajo control de la Autoridad Palestina se ha instalado un sistema anticuado, donde las pérdidas alcanzan incluso el 40% de agua distribuida.

Rami, un joven padre de familia que reside en el centro histórico de Belén, cuenta: «El suministro de agua se reduce tanto que todas las familias del barrio se ven obligadas a buscar agua mediante camión cisterna. Así que vamos a pagar casi 10 veces más que el precio inicialmente solicitado por la ciudad, y muchos no pueden permitírselo».

Para poner freno a este problema, la Asociación pro Terra Sancta ha puesto en marcha un proyecto que lleva por nombre «Deseo de agua” en la zona de Belén, donde muchas familias no tienen ingresos suficientes para cubrir los costes de mantenimiento o sustitución de los depósitos, tratando así que de mejorar las condiciones de vida de muchas personas, a través de la instalación de nuevos depósitos.

Algunas de estas familias se componen de un núcleo numeroso, y viven en viviendas muy antiguas que requieren un mantenimiento constante. Este es el caso de Ilyas y su esposa Amal, que viven en el corazón de Belén y tienen cinco hijos. Ilyas se encarga personalmente del mantenimiento de la casa, pero su depósito de agua, gastado por el uso, debe cambiarse. Su esposa trabaja de vez en cuando, mientras los niños -dos niños y tres niñas- viven en casa con sus padres y están completando sus estudios.

La instalación de nuevos depósitos, comprados a través del proyecto, permitirá a las familias resolver el problema de las fugas de agua y la contaminación del agua, sin que estén obligadas a obtener el agua mediante camiones cisterna a un precio exorbitante.

Le recordemos que a través de nuestra Campaña de Navidad puede ayudar a las familias de Belén, también respecto al problema del agua. Con 300 euros se puede instalar un depósito de mil litros de agua para una familia. Pero cada contribución, incluso la más pequeña, es un signo de esperanza y ayuda práctica para muchas personas.

¡Descubra aquí cómo puede ayudar!