mosaic art conference

“Nadie nace de la nada. Tenemos raíces comunes”: el mensaje fuerte de la Conferencia del mosaico en Palestina.

Giacomo Pizzi8 junio 2016

Se concluyo con un gran éxito la primera edición de la Conferencia Internacional sobre el arte del mosaico en Palestina.

Por la primera vez en absoluto, profesores, investigadores académicos, artistas y expertos del mosaico locales e internacionales, se encontraron para definir una panorámica de las condiciones del patrimonio artístico palestino.

Por tres días intensos entre Jericó y Sabastiya donde, además de los discurso de los expertos y se adjuntaron las visitas a los sitios.

“Espero que la conferencia sea un paso, aunque pequeño, hacia una colaboración más estrecha para la conservación de esto increíble patrimonio cultural desconocido”, es el deseo de Carla Benelli, gerente de los proyectos culturales por la Asociación pro Terra Sancta y promotora del evento, junto con Osama Hamdam del Mosaic Centre de Jericó y tres profesores de la Al-Quds University.

¿Por qué vale la pena seguir en esta obra de conservación en un momento como esto?

“La ayuda humanitaria para socorrer las personas más golpeadas por la guerra es muy importante”, contesta Osama Hamdam, que desde hace años tenía el sueño de organizar un evento similar. “Pero lo que está pasando en Medio Oriente amenaza la destrucción de la identidad de los pueblos. El ISIS apunta justo a esto: destruir la identidad y la memoria del Medio Oriente. Pero el hombre no vive solo de pan y agua.»

Por esta razón la conservación y la restauración son prioridades de los franciscanos de la Custodia de Tierra Santa también. La dedicación de la conferencia, “a los colaboradores y amigos que ya no están entre nosotros”, habla claro.

Entre ellos Osama Hamdam quiere nombrar dos personas en particular: padre Piccirillo, fraile franciscano que “me cambió la vida”, dice, y “Rasmi, un compañero que verdaderamente dio lo mejor de sí mismo para la conservación de esto patrimonio y para la formación de muchos jóvenes palestinos.”.

Preservar, entonces, y educar a los jóvenes a amar a esta riqueza, porque “Nadie nace de la nada” concluye Hamdam. “Tenemos raíces comunes”, y no pueden desaparecer.